Primero sentarse de forma errónea con la espalda encorvada. Luego enderezamos la pelvis sin intentar erguir la espalda de forma consciente.
Ahora ponemos el dorso de la mano en la zona lumbar para poder sentir muy bien el movimiento de la pelvis. Se repite lentamente varias veces hasta que resulte natural (mejor hacerlo delante de un espejo). Si se actúa correctamente todo el tronco se endereza sin esfuerzo y por sí solo, la columna cervical se extiende y sostiene la cabeza de forma correcta, es decir sin levantar la barbilla en el aire. Es preciso no olvidar esta postura a lo largo del día. No se conseguirá enseguida pero se tendrá cada vez más conciencia de la postura incorrecta.
Recomendación especial:
Es muy peligroso para personas con piernas largas sentarse con las piernas cruzadas o "enrolladas" ya que esto cansa la espalda y la curva hacia atrás.
También es conveniente observar como están sentados los demás pues se comprobará a menudo lo erróneo de las posturas y por qué tantísima gente tiene dolores de espalda.
Postura incorrecta sentado
Postura correcta sentado
Como deben ser los muebles para sentarse
Altura idónea: El ángulo de la articulación de las piernas con la pelvis ha de ser de 90º o un poco más, nunca menor. La flexión de rodillas igual.
Menor utilizar sillas o taburetes regulables.
El respaldo debe tener su punto de apoyo en la zona lumbar y no debe ser más alto que los omóplatos. Un respaldo alto (por ejemplo sillones) empujan la cabeza hacia delante.
Ni las sillas ni asientos de coches deben inclinarse hacia atrás. Si bajan atrás deben nivelarse con un cojín duro en forma de cuña.